Dos minutos le bastaron a Ricardo “Capi” Téllez para vencer por nocaut técnico en el primer round a Ángel Salas en la pelea estelar de la velada “Noche de Guerreros Otomíes”, efectuada en el Centro Deportivo de Temoaya, que registro una aceptable entrada.
Fue en peso Superpluma donde el metepequense se mostró superior conectando un upper que le reventó la ceja a Ángel por lo que el referí detuvo la pelea y decreto la victoria del “Capi”.
Con ello, el pupilo de Adán Vargas suma como profesional su segunda pelea ganada, luego de que en el mes de Julio en Metepec hizo su debut ante Emmanuel Fernández a quien vencio por la vía rapida en el segundo round.
“El triunfo es reflejo de una gran preparación que hemos hecho, de un trabajo duro, sobre todo mucha disciplina y sacrificio, yo no quiero decir que tuve enfrente un rival pequeño, porque hizo una gran pelea y ante todo, se puso los guantes y subió al cuadrilátero, y no cualquiera lo hace”, fue el sentir del “Capi” Tellez.
En la pelea semifinal, pactada a 4 rounds en peso superpluma, Jahaziel Ramos originario de Cuajimalpa no tuvo el debut deseado y aunque se preparó para ganar, los nervios lo traicionaron, se vio corto al ataque y faltó de golpes y al igual que el temoayense Christian Irineo Gaspar, tiraron golpes con la cabeza recibiendo llamadas de atención por parte del referí que a punto estuvo de descalificarlos; aún así, ambos boxeadores brindaron espectáculo, y al final, los jueces decretaron un empate.
“Que puedo decir, tenía la ilusión de debutar en el profesionalismo con una victoria, pero el rival también cuenta, sin embargo, me siento contento porque tuve una buena preparación, espero volver a encontrarlo y decidir quién es el ganador”, sentenció Jahaziel Ramos, pupilo de Gregorio Vargas.
En la tercer contienda pactada a 4 rounds en peso pluma, Leonardo Arango Vargas, con un boxeo fuerte, estilista y muy rápido vencio por decisión unánime al vallesano Miguel Pedraza, quien no pudo encontrar al rival en ningún momento.
Arango por su parte, con una técnica bastante inteligente se dedicó a boxear, fue precavido y nunca se fajo, por el contrario, supo utilizar bien su distancia, sus piernas, su jap y el cuerpo, pegando golpes abajo y arriba, diseñando una excelente estrategia que le valió levantar el puño en señal de triunfo.
“Me sentí bien, tuve una preparación muy buena, me prepare a conciencia, creo que los golpes que utilice fueron los adecuados, sabía que enfrente tenía a un rival fuerte, pero afortunadamente tengo al mejor preparador, Gregorio Vargas”, dijo el originario de Cuajimalpa, quien aseguro estar listo para escenificar otra pelea.
En la cuarta pelea, Brayan López fue un autentico “Devorador”, al lograr la victoria sobre el capitalino Pablo González, a quien no solo venció por decision unánime en 4 rounds sino que terminó reventándole la nariz ante la complacencia de los aficionados que en todo momento no dejaron de gritar su nombre.
Fue una vibrante pelea en la que Brayan con un puño demoledor, tiro golpes a más no poder terminando con el oriundo de Atlacomulco, quien no supo manejar su guardia y salirse de la esquina de su rival, que lo estuvo cazando con varios uppers, cauteos, roling y el puño derecho, para aniquilarlo dejándolo sangrando de la nariz.
“Valio la pena todo el esfuerzo, y todo lo que se dijo abajo del ring quedó en palabras, porque mis puños hablaron por si solos, reconozco que Pablo es un buen peleador pero no contó con el puño del “devorador” López”, dijo el boxeador quien también está bajo las órdenes de Gregorio Vargas.
En la quinta contienda pactada a 6 rounds en peso pluma, y con un inicio tambaleante que amenazaba su récord de 7 peleas ganadas, Eduardo “El Huracán” García enfrento a un rival muy fuerte, Antonio “Tony” Gutiérrez, quien lo hizo caer en su juego, sin embargo, el huixquiluquense cambio la estrategia y comenzó a machacar a Tony tomándolo por sorpresa, para poco a poco, irlo bajando hasta lograr ganar la pelea por decisión unánime.
“Fue una pelea muy dura sabía que iba a enfrentar a un rival muy fuerte al que no podía subestimar, por un momento caí en su juego al final de los rounds que me hizo pensar que podía perder la pelea, y aunque tire buenos golpes, reconozco que me hizo falta una gran variación de combinaciones, afortunadamente cambie la estrategia y apreté, fue una difícil decisión a los ojos de los jueces porque solo fueron 2 puntos los que me dieron la victoria”, finalizo diciendo el oriundo de Huixquilucan.
Así fue como finalizo la velada “Noche de Guerreros Otomies”, con el dominio de los pupilos de Gregorio Vargas y Adán Vargas, quienes con una excelente técnica se llevaron la tarde ante el beneplácito de los aficionados al rudo deporte de los puños.