Luis Fernando Vivero Domínguez, docente UAEMéx, reconocido por su aportación a la investigación y difusión del patrimonio histórico de México

  • Su tesis de maestría “Hombres de Iglesia y hombres del mundo: población y disciplina eclesiástica del clero secular del arzobispado de México, 1764 – 1810” ganó el Premio Nacional Francisco Javier Clavijero en Historia y Etnohistoria del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en su edición 2024.

Toluca, Méx; 02 de octubre de 2024. Motivado por la inquietud de comprender el pasado y unir a la sociedad fomentando la comprensión social a través del estudio de la historia, Luis Fernando Vivero Domínguez, docente de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), ganó el Premio Nacional Francisco Javier Clavijero en Historia y Etnohistoria del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en su edición 2024 a la Mejor Tesis de Maestría.

A través de su tesis de maestría “Hombres de Iglesia y hombres del mundo: población y disciplina eclesiástica del clero secular del arzobispado de México, 1764 – 1810” contribuye al objetivo del Premio Nacional Francisco Javier Clavijero en Historia y Etnohistoria, el cual es aportar a la investigación, difusión y conservación del patrimonio y la diversidad cultural de México.

El objetivo del académico fue que el conocimiento sobre la historia eclesiástica genere interés sobre la cultura religiosa y cómo ésta ha permeado aspectos de la vida cotidiana y de la ideología de la sociedad latinoamericana.

A través de la investigación de Vivero Domínguez se analizaron las críticas hacia el exceso de sacerdotes no sujetos a votos religiosos, además, explicó las problemáticas que estos tuvieron para formarse a través de la disciplina eclesiástica, la cual ayuda a la iglesia a mantenerse fiel a su misión y a los miembros a parecerse más a Jesucristo.

Durante la elaboración de su tesis, el académico se enfrentó a los desafíos derivados de la pandemia causada por el virus SARS-CoV2, los cuales afectaron las formas tradicionales de acceder a archivos físicos y bibliotecas, complicando la investigación de fuentes primarias, elemento esencial para los estudios históricos.

No obstante, dijo, esto también fue una oportunidad para adoptar herramientas digitales y métodos innovadores de búsqueda de información, demostrando que la investigación puede prosperar incluso en tiempos de crisis. Además, resaltó la importancia de incentivar una sociedad dispuesta a avanzar en el uso de tecnologías y estrategias colaborativas para la generación de conocimiento, evidenciando que el interés por el pasado puede inspirar a las futuras generaciones a construir un futuro más resiliente y conectado.

“En estos tiempos donde se prioriza mucho el individualismo es donde hace falta involucrar más a la historia, ya que esta nos ayuda a empatizar y a entender que las personas somos y pensamos diferente, pero que son aquellas distinciones las que nos permiten crear lazos entre nosotros” mencionó.

En su labor como docente de la UAEMéx, espera que, así como él ha sido inspirado por los suyos, el estudiantado de las humanidades y ciencias sociales profundicen, de manera responsable y constante, en la investigación y aportación de la historia para que den fruto al conocimiento de futuras generaciones.

“El consejo para mis futuros colegas es que siempre hay que hacer las cosas, no persiguiendo un reconocimiento, sino haciendo algo que nos guste, porque cuando algo te llama la atención y lo disfrutas, lleguen o no los premios, la satisfacción siempre estará”, concluyó.